Lo imposible, solo tarda un poco más

lunes, 23 de abril de 2012

Me he despertado y hoy mi cama sabía distinta, no era un sabor amargo del despertar de otro domingo después de una noche de fiesta, oliendo todavía a restos de alchol de la noche anterior,no, hoy no. Por una vez, no ha sido así, mi cojín olía a colonia,no había restos de maquillaje, esta mañana no me ha molestado el sol al despertarme un rayo dandome en la parte derecha de mi cara, ni la suave brisa primaveral entrando por la ventana,que ha echo que me encojiera y no pudiera evitar taparme un poco más, tampoco me ha importado la hora que era, esta vez no eran las tres de la tarde, no me he levantado con gritos mandandome ir a comer, y no he sentido mareos ni dolores de cabeza. Me he quedado en la cama mirando hacía el cielo, con la misma postura como la que me dormí anoche, solo que con una diferencia y esque hoy solo podía observar nubes claras azules mientras que anoche, el cielo estaba impregnado de estrellas. He podido estar una hora metida en la cama, sonrriendo, y sin hacer nada más, y entonces me he dado cuenta, de que los domingos, al fin y al cabo no son malos, que empiezan a gustarme. 

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